Luis Castilla: “Si el país no aprovecha el bono demográfico, se afectará el crecimiento de su economía”
Pese a que el Perú ha estado en una fase de bono demográfico durante la última década, varios factores han limitado su capacidad para aprovecharlo, como la insuficiente calidad educativa, la informalidad laboral, la falta de inversión en salud y la desigualdad económica, señala el exministro de Economía y director de Videnza Instituto.
Reproducir:
Por: Mirtha Trigoso López
¿Qué tan importante es el factor demográfico para la economía del país?
El factor demográfico es crucial para el crecimiento de la economía del Perú, principalmente debido al llamado «bono demográfico». Este fenómeno se refiere a la situación en la que la proporción de la población en edad de trabajar supera a la de dependientes (niños y ancianos), lo que puede generar un impulso significativo en el crecimiento de la economía si se acompaña de políticas adecuadas.
De acuerdo con estimaciones del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), la población de Perú alcanzó los 33, 7 millones, con aproximadamente el 40 % de los habitantes tiene entre 15 y 29 años. Esta estructura poblacional refuerza la oportunidad de aprovechar esta fuerza laboral joven en favor del crecimiento económico. Actualmente, Perú atraviesa un periodo de bono demográfico con tasas de dependencia a la baja desde 1970, alcanzando su mejor resultado (50,8%) en 2021.
¿Qué ventaja diferencial nos da el factor demográfico frente a otros países?
El Perú cuenta con una ventaja competitiva debido a su actual fase de bono demográfico, caracterizada por una proporción favorable entre la población en edad de trabajar y los dependientes. Esta ventaja permite al Perú contar con una población activa que puede contribuir significativamente al crecimiento económico, siempre y cuando se logre mejorar la productividad laboral.
Entre los países de la Alianza del Pacífico, Perú es uno de los que ha incrementado la participación del factor demográfico en el crecimiento del PBI per cápita entre 1960 y 2019. Por otro lado, Chile experimentó reducciones en la contribución demográfica a su PBI per cápita. Por ejemplo, el factor demográfico pasó de explicar el 23,5 % del crecimiento del PBI per cápita chileno en 1960-1979 a solo 5 % en 2000-2019.
En el caso de los países desarrollados, el factor demográfico ha tenido reportan aportes negativos. En Francia, Italia y España, este factor restó alrededor de -0,2 puntos al crecimiento promedio anual del PBI per cápita en el periodo 2000-2019.
CAUSAS DE LA PROBLEMÁTICA
¿Por qué Perú no ha aprovechado el bono demográfico en la última década?
A pesar de haber estado en una fase de bono demográfico durante la última década, varios factores han limitado la capacidad del país para aprovechar plenamente este fenómeno y traducirlo en un crecimiento económico sostenido. Entre estos factores se encuentra la insuficiente calidad educativa. Aunque la matrícula escolar ha aumentado de forma sostenida, la calidad de la educación en el Perú sigue siendo un desafío.
Además, la informalidad laboral es elevada. En 2023, la tasa de informalidad representó el 71,1% del empleo total, según la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho). La informalidad afecta a la productividad, ya que muchas empresas informales prefieren producir a baja escala para evitar ser detectadas, lo que les permite reducir costos laborales, pero disminuye la productividad agregada.
Otros factores que limitan el aprovechamiento del bono demográfico son la falta de inversión en salud y la desigualdad económica.
¿Cómo afectan estos dos últimos factores al no aprovechamiento del bono demográfico?
La falta de inversión en salud limita la capacidad de la población joven para mantenerse productiva. En 2023, el 43,1% de los niños entre 6 y 35 meses presentó anemia, según la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar (Endes). La anemia en los primeros años de vida afecta el desarrollo y rendimiento escolar, lo que a su vez reduce la productividad laboral futura. Además, la infraestructura de salud limitada afecta especialmente a las poblaciones vulnerables, disminuyendo la expectativa de vida saludable y afectando el desempeño laboral a largo plazo.
Por otro lado, la desigualdad socioeconómica, es decir, las brechas entre las zonas urbanas y rurales, así como entre diferentes grupos socioeconómicos, ha impedido que grandes sectores de la población joven accedan a oportunidades laborales de calidad.
En conjunto, todos los factores mencionados han obstaculizado el aprovechamiento pleno del bono demográfico, resultando en un crecimiento económico menor al potencial esperado.
AUTORIDADES EN ACCIÓN
¿Qué acciones deben tomar las autoridades para aprovechar el bono demográfico y contribuir al crecimiento del PBI?
Las autoridades deben tomar medidas en varias áreas claves. En primer lugar, es necesario mejorar la educación, invirtiendo en la capacitación docente y en el desarrollo de metodologías educativas modernas que mejoren los resultados de aprendizaje. Ampliar el acceso a la educación superior de calidad será también fundamental para incrementar la productividad.
Además, es urgente una reforma laboral para reducir la informalidad. Esto requiere fortalecer la legislación y los incentivos, considerando que Perú tiene uno de los costos laborales no salariales más altos en Latinoamérica y el Caribe.
También es importante, fomentar el desarrollo de empleos formales bien remunerados mediante la promoción de sectores claves de la economía, como la manufactura avanzada, tecnología y servicios.
En el ámbito de la salud, se debe mejorar el acceso a los servicios mediante la inversión en atención preventiva y la reducción de disparidades entre áreas rurales y urbanas. Asimismo, deben desarrollarse políticas de protección social inclusivas, creando programas focalizados en la juventud, como seguros de desempleo, capacitación y reinserción laboral.
CONSECUENCIAS
¿Cuáles serán las consecuencias de no aprovecharse el bono demográfico?
Las consecuencias de no aprovechar el bono demográfico pueden ser severas, afectando tanto el crecimiento económico a largo plazo como el bienestar general de la población. Un envejecimiento acelerado de la población sin preparación adecuada aumentará la dependencia y la presión sobre el sistema de seguridad social.
Además, el desempleo juvenil podría incrementarse. Actualmente, el 9,2 % de la población entre 15 y 29 años está desempleada. Si no se generan suficientes oportunidades de empleo formal y de calidad, esto podría llevar a un desempleo juvenil crónico. También se podría producir una expansión del sector informal, perpetuando la baja productividad, los bajos ingresos y la falta de acceso a protección social.
El crecimiento económico podría estancarse debido a una menor productividad laboral. Según estimaciones del Instituto Peruano de Economía (IPE), la productividad laboral en el Perú está un 10 % por debajo de lo que debería. Sin una población joven adecuadamente capacitada, la economía podría no avanzar.
Finalmente, la pobreza y desigualdad persistirán si no se aprovecha el bono demográfico, perpetuando las brechas socioeconómicas existentes y reduciendo la competitividad internacional, con el riesgo de fuga de talentos y dependencia de sectores de bajo valor agregado.
LEER MÁS
Jorge Lira: “Reactivación de la construcción impulsará importaciones de maquinaria pesada”
Pese a que el Perú ha estado en una fase de bono demográfico durante la última década, varios factores han limitado su capacidad para aprovecharlo, como la insuficiente calidad educativa, la informalidad laboral, la falta de inversión en salud y la desigualdad económica, señala el exministro de Economía y director de Videnza Instituto.