CCL condena actos de violencia en Puno e invoca al Gobierno a identificar y dar a conocer a responsables

La Cámara de Comercio de Lima (CCL) lamentó el fallecimiento de 17 civiles y un efectivo policial en Puno, donde graves hechos de violencia y vandalismo ocasionaron además la destrucción de propiedad pública y privada; por ello demandó al Gobierno cumplir con su deber de restaurar el orden y garantizar la seguridad y bienestar de la población.

 

El gremio empresarial señaló también que es urgente que el gobierno lleve a cabo las investigaciones correspondientes para identificar a los responsables de generar la violencia y actos delictivos que han llevado a esta situación extrema y darlos a conocer de manera clara y transparente a todos los ciudadanos del país.

 

La CCL precisó que, de ninguna manera, bajo el argumento de la legítima protesta, se pueden justificar el asesinato de un policía, el saqueo de locales comerciales, el robo de mercaderías, el ataque e incendio de inmuebles, vehículos, el asalto a transeúntes, además de la amenaza a la integridad de las personas como los ocurridos en las últimas horas.

 

Asimismo, el gremio subrayó que estas actitudes deslegitiman cualquier reclamo, pues ponen en riesgo vidas humanas y el trabajo directo e indirecto de millones de peruanos que necesitan seguir trabajando para sostener a sus familias.

 

“El Poder Ejecutivo tiene la responsabilidad de velar por la seguridad de la población, evitar la paralización de las actividades económicas y restablecer el orden garantizando los derechos al libre tránsito y al trabajo que garantizan la Constitución”, manifestó la CCL.

 

El gremio empresarial invocó al Gobierno a restablecer la paz social que permita a nuestro país recuperar un nivel de convivencia que facilite el diálogo.

 

Finalmente, la CCL llamó a la unidad nacional para defender integridad del país.

 

 




Peter Anders: Unidos saldremos de esta crisis

Es inmensurable el grave daño que, en apenas nueve meses de gobierno, el profesor Pedro Castillo, sus ministros, exministros, funcionarios y socios políticos han provocado y siguen provocando al país, especialmente en la vida, salud, seguridad y bienestar de la población, así como en su institucionalidad democrática y economía.

 

Pero también están comprometiendo nuestro futuro como sociedad, a la que se empeñan en intentar fracturar, promoviendo odios y divisiones.

 

Como si todo esto no fuera suficiente, otro grave perjuicio que provocan la incapacidad e improvisación que se han instalado en Palacio de Gobierno, es la amenaza a las grandes potencialidades de nuestro país, a su desarrollo y al futuro de nuestros hijos o nietos, arrastrando con ello todo lo que han construido por décadas, con esfuerzo, creatividad, talento y sacrificio, nuestros padres, abuelos, nuestras generaciones precedentes y nosotros mismos.

 

La irracional inmovilización social y paralización total de actividades económicas dispuesta la semana pasada en Lima y Callao, terminó por despejar cualquier duda que quedaba sobre la gravedad del trance en que nos encontramos.

 

Con qué derecho y al amparo de qué puede ordenarse a los empresarios, emprendedores y millones de hombres y mujeres que a diario salen a trabajar para llevar el sustento a sus familias, que están prohibidos de hacerlo; aunque un ministro -nada menos que de Justica y Derechos Humanos- no crea “que se queden sin comer porque es un día”.

 

¿Es posible tanta ignorancia sobre la realidad nacional, tanto desprecio por el esfuerzo de millones de peruanos? El actual escenario nos muestra dramáticamente que sí, que estamos ante un gobierno que está destruyendodesconocemos si intencionalmente o no- la economía de nuestro país, que en el 2012 tenía un Producto Bruto Interno (PBI) potencial de 5,8% y que este año apenas se ubicaría entre 2 y 3%.

 

Este empeño por demoler ya no un modelo económico determinado, sino toda la estructura básica de la economía, llevará a que los seis millones de puestos de trabajo perdidos durante la pandemia no solo no se recuperen, sino que aumente el desempleo y se agrave la situación de los 16 millones de peruanos que se encuentran en situación de pobreza y vulnerabilidad.

 

No deja de causar asombro tal desconocimiento de nociones tan básicas de economía, que no se entienda que la pobreza no se combate regalando bonos o víveres, que lo urgente es generar condiciones para que el empleo formal crezca y que en lugar de elevar por decreto la remuneración mínima vital, se debe aumentar la productividad para que las micro, pequeñas y medianas empresas puedan pagar mejores sueldos.

 

Nuevamente, como una salida a esta zozobra permanente en la que vivimos, comienza a hablarse de la posibilidad de un cambio de ministros, como si existiera –después de tantos gabinetes fallidos- alguna garantía de que no se seguirá repartiendo ministerios, obras, asesorías y consultorías para pagar favores políticos y asegurar los votos en el Congreso para impedir la vacancia presidencial.

 

¿Un nuevo Consejo de Ministros, que deberá nuevamente exponer la “política general del gobierno” es la solución? ¿Cuál política? ¿Alguna de las sucesivas que han expuesto los fracasados jefes del gabinete anteriores?

 

Si algún resultado en materia económica ha tenido la aplicación de esta “política general del gobierno”, es que el grado de inversión que con tanto trabajo consiguió el Perú en los mercados internacionales se vaya perdiendo y hoy tenga la segunda calificación más baja y que ésta ya no sea estable sino negativa. Esta rebaja ha afectado a cinco bancos peruanos, encareciendo el costo del crédito a las empresas, así como los créditos de consumo, hipotecarios y automotrices. ¿A quién golpea más esta situación?

 

Ahora, para tratar de apaciguar los conflictos sociales y la ola de violencia y vandalismo que azota las carreteras, al profesor Castillo no se le ha ocurrido mejor idea que armar una troupe de “Consejos de Ministros Descentralizados” que recorre ciudades rodeado de dos mil policías y en los que no se pasa de hacer promesas populistas sin sustento ni sentido.

 

Hemos llegado a un punto de quiebre que nos obliga a asumir una actitud más activa, para ir trabajando desde este momento la que deberá ser la obligada transición que permita al Perú recuperarse y salir de esta gran ciénaga a la que ha sido arrastrado por el odio y la irresponsabilidad de quienes se sumaron al juego del profesor Castillo y su promotor Vladimir Cerrón, y que hoy convenientemente procuran hacerse los desentendidos.

 

Debemos ir analizando las salidas legales, constitucionales y políticas que hagan al Perú recuperar la senda democrática y la recuperación económica, lo que necesariamente pasa por contar con organismos electorales independientes que no solo ofrezcan las naturales garantías de neutralidad necesarias en todo proceso electoral, sino también que generen confianza y credibilidad en todos los peruanos.

 

El Perú es de todos, el Perú somos todos y a todos nos toca en esta hora difícil, unirnos para sacarlo adelante y recuperar su futuro; como lo han hecho antes tantos peruanos anónimos en situaciones aún más dramáticas como las que ahora nos toca enfrentar.

 

Unidos todo es posible, pero no podemos dejar pasar más tiempo. Llegó la hora de actuar y demostrar que estamos contigo Perú.

 

 

 

 

 




CCL condena actos de violencia en protestas e invoca al Gobierno a restaurar imperio de la ley 

La Cámara de Comercio de Lima (CCL) demandó al gobierno cumplir con su deber de garantizar la seguridad y bienestar de la población frente a los actos de violencia y vandalismo que se multiplican por todo el país, así como garantizar la propiedad pública y privada.

 

El gremio empresarial cuestionó la inacción de las autoridades frente a la ola de protestas que se venía anunciando desde hace varias semanas atrás, así como la reacción tardía que se limita a establecer “mesas de diálogo” y firmar actas que no significan una solución integral y definitiva a los problemas, como ha ocurrido en anteriores protestas que luego con el pasar del tiempo escalan cada vez más.

 

“El Poder Ejecutivo tiene la responsabilidad de velar por la seguridad de la población, evitar la paralización de las actividades económicas y restablecer el orden garantizando los derechos al libre tránsito y al trabajo que garantizan la Constitución”, manifestó la CCL.

 

Puntualizó que, de ninguna manera, bajo el argumento de la legítima protesta, se pueden justificar actos de violencia y vandalismo, como el saqueo de locales comerciales, el robo de mercaderías, el ataque e incendio de vehículos, el asalto a pasajeros y transeúntes, además de la amenaza a la integridad de las personas como los ocurridos en las últimas horas y que han quedado registrados en videos.

 

La CCL subrayó que estas actitudes deslegitiman cualquier reclamo, pues ponen en riesgo vidas humanas y el trabajo directo e indirecto de millones de peruanos que necesitan seguir trabajando para sostener a sus familias.

 

Finalmente, reclamó la inmediata presencia de ministros y congresistas oficialistas en las zonas en conflicto a fin de buscar una solución.

 




CCL: Violencia y vandalismo deslegitiman cualquier protesta

La Cámara de Comercio de Lima(CCL) solicita al Gobierno la sustitución del ministro del Interior, Luis Barranzuela, nombrando en su remplazo a un profesional idóneo y capacitado para el cargo, que pueda liderar la lucha contra la delincuencia y enfrentar la ola de violencia y vandalismo que azota el país, reestableciendo el principio de autoridad con todo el peso de la ley.

 

El gremio empresarial manifestó que el presidente Pedro Castillo y la presidenta del Consejo de ministros, Mirtha Vásquez, como máximas autoridades del país, tienen la responsabilidad de velar por la seguridad de la población, restablecer el orden público y garantizar los derechos al libre tránsito y al trabajo que garantizan la Constitución.

 

Puntualizó que, de ninguna manera, bajo el argumento de la legítima protesta, se pueden justificar actos de violencia y vandalismo, como los ataques a la propiedad pública y privada, el incendio de vehículos y locales, el robo y el pillaje, la amenaza a la integridad de las personas y la paralización de actividades económicas como los ocurridos en las últimas horas.

 

La CCL reafirmó su respeto al derecho de protesta que también reconoce la Constitución, pero siempre que se ejercite dentro de los cánones de la ley y el respeto absoluto a la propiedad pública y privada, sin afectar los derechos de los demás.

 

Subrayó que actos de violencia deslegitiman cualquier protesta, pues ponen en riesgo vidas humanas y el trabajo directo e indirecto de miles de peruanos que durante años se han esforzado por desarrollar el país.

 

Por ello, consideró urgente que el Gobierno restablezca el principio de autoridad, para lo cual se requiere de un liderazgo presidencial que designe cuanto antes a un nuevo ministro del Interior y que respalde firmemente el accionar de la Policía Nacional del Perú, sobre todo en la situación que emergencia sanitaria y económica que enfrenta el Perú.

 

Asimismo, indicó que la autorización para que las Fuerzas Armadas apoyen a la Policía Nacional del Perú en el control y mantenimiento del orden interno en Lima y Callao, debe ampliarse, cumpliendo a cabalidad todas las normas, a las zonas del país donde ocurran actos de violencia.

 

Finalmente, manifestó que lo que menos se requiere en un contexto como este, es que se sume una crisis de inseguridad, descontrol y desgobierno.




La Semana

Qué es la violencia basada en género y cómo enfrentarla

 

La Comisión de Desarrollo de la Mujer Empresaria, realizó su Conversatorio ¿Qué es la violencia basada en género y cómo enfrentarla?, evento que fue coorganizado con Plan International.

 

En dicha cita participaron Néstor Vergara, representante del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables; Eliana Revollar, de la Defensoría del Pueblo; y Carla Tamagno, presidenta Asociación de Mujeres Empresarias del Perú (AMEP).

 

El evento tuvo como finalidad resaltar la importancia de sensibilizar e informar sobre la violencia de género y cómo seguir contribuyendo desde el empresariado de manera articulada con el sector público.

 

 

Hacia dónde va la educación en el futuro: Desafíos post pandemia

 

El Sector Educativo del Gremio de Servicios de la CCL realizó el conversatorio denominado Hacia dónde va la Educación en el Futuro: Los desafíos post pandemia, donde participaron profesionales expertos nacionales e internacionales de instituciones empresariales y educativas, para dar a conocer las diferentes perspectivas y estrategias que han implementado los stakeholders vinculados a la educación en todos sus niveles y modalidades; así como la manera de encarar su futuro.

 

Para participar en los eventos de la comisión puede contactarse al correo gremioservicios@camaralima.org.pe o al 219-1823.