Mujeres resaltan que su bienestar mental es lo más importante en una relación laboral

En el mes de marzo, todas las personas e instituciones suelen abrazar el Día Internacional de la Mujer con un nuevo impulso para promover la equidad como pilar clave en el fomento de espacios de discusión y soluciones que equilibren las oportunidades laborales, tanto para mujeres como para hombres.

 

En esta reflexión de equiparar la cancha para colaboradoras y colaboradores, el estudio “What Women Want at Work” (Lo que quieren las mujeres en el trabajo) de ManpowerGroup, destaca que el grupo femenino valora mucho más el bienestar mental en una relación laboral, sobre todo en un periodo post pandemia. Tal es así que 1 de cada 3 mujeres desearía que su jefe o gerente comprendiera mejor el impacto de su carga laboral en su salud mental.

 

Para Silvana Cárdenas, directora de Right Management para LATAM, las industrias y negocios en el país están cada vez más preparados y con mejores estrategias de inclusión y equidad.

 

La fuerza laboral femenina desea un mayor equilibrio entre la vida laboral y familiar; más flexibilidad de horarios en el inicio y fin de su jornada y mayor estabilidad laboral para alejarse del miedo de perder su empleo. Frente a estas demandas, los empleadores vienen promoviendo espacios de aprendizaje y mentoring, así como de liderazgo y feedback necesario para superar posibles puntos de mejora”, destaca la experta.

 

Voces en altavoz

En busca del bienestar mental de las mujeres, el estudio de ManpowerGroup también señala que el 19% de las colaboradoras desea que su jefe comprenda los desafíos de ser una madre que trabaja, demandando un rango de beneficios emocionales como, por ejemplo, días de asesoramiento o capacitación, días de bienestar y subsidios de bienestar mental.

 

En este punto coincide IPSOS Perú, cuando señala que en el país el 71% de las mujeres han experimentado más problemas de salud mental que los hombres (57%). Y el 60% de ellas dice haber sentido más ansiedad que los hombres (49%).

 

Asimismo, la investigación de ManpowerGroup informa que el 35% de las mujeres cambiaría el 5% de su salario por trabajar durante una semana de 4 días; mientras que un menor porcentaje (16%) haría lo mismo, pero por teletrabajar.

 

Ellas importan

La directora de Right Management para LATAM resaltó también que aproximadamente el 33% de los trabajadores de las empresas en el Perú son mujeres, y que actualmente muchas de ellas se sienten desmotivadas en sus centros de trabajo debido a que no reciben un adecuado training de sus líderes.

 

Esta situación está alineada con lo reportado por ManpowerGroup, pues la consultora precisa que más del 40% de mujeres trabajadoras no cree que su líder reconozca sus habilidades o potencial en el centro de labores.  

 

Esta situación hace que el 50% de las mujeres quiera dejar su empleo actual por otro que le ofrezca más salario y beneficios.

 

“Para cambiar este panorama, y hacer que las mujeres se sientan a gusto en sus trabajos, será importante que los líderes, y empleadores en general, fomenten más espacios de colaboración, promuevan sus iniciativas e ideas, ofrezcan capacitación, las involucren en desafíos constantes, destaquen sus logros y les otorguen más facilidades para que puedan desempeñar sus funciones adecuadamente, siguiendo un plan de crecimiento profesional”, finalizó Silvana Cárdenas.

 

El estudio What Women at Work encuestó a 4.000 mujeres en las regiones de América y Europa.

 




Detox digital: La adicción a las redes sociales y cómo controlarla

La llegada de la pandemia hizo que las herramientas tecnológicas desarrollaran actualizaciones permanentes, permitiendo que estas se convirtieran en el compañero permanente de todas las generaciones durante el encierro.  Según Statista, portal de estadística en línea, a inicio de enero del 2022 Colombia se ubicaba en el cuarto país con más número de usuarios en internet en América Latina.

 

Vale la pena resaltar que, las redes sociales al inicio tenían el objetivo de entretener, en la actualidad son el principal medio de información de gran parte de la población. Según EAE Business School las redes sociales proyectan influencia sobre la vida y comportamientos de los consumidores, desde las más inocuas decisiones de compra, hasta el voto político.

 

Sin embargo, lo más preocupante de su mandato es el asalto constante a nuestra atención. La conectividad permanente y su fácil accesibilidad nos mantiene el móvil en mano 24/7, y se convirtió en una necesidad hacer scroll como pasatiempo.

 

Efectos dañinos

 

Un estudio realizado por la Universidad Tecnológica de Sydney, demostró que existe casi medio centenar de efectos dañinos que genera el uso excesivo de las redes sociales y los aparatos electrónicos, además, dicen que las redes sociales más perjudiciales para la salud son Twitter, Facebook e Instagram, ya que son las redes en las que más exponemos nuestra vida privada.

 

El uso de las redes sociales sin control, afecta la salud mental de las personas, genera frustración, confusión, insomnio, estrés, ansiedad, baja autoestima, distracción en el trabajo y estudio, aislamiento, bajo rendimiento, y desinterés por otros pilares de la vida.Las adicciones, en su esencia más primitiva, desencadenan un efecto bola de nieve, arrasando con otras parcelas de tu identidad y entorno” complementa Chelo Morillo profesora de EAE Business School.

 

A pesar de que la adicción a la tecnología no está reconocida como un trastorno, muchos estudios y expertos validan que el uso excesivo de los dispositivos y las redes sociales representan una adicción conductual que tiene repercusiones negativas sobre el bienestar físico, psicológico y social.

 

Detox digital

 

Frente a esta problemática aparece el término ‘detox digital’ o la ‘desintoxicación digital’, un proceso que tiene como objetivo disminuir o dosificar el tiempo de uso de aparatos electrónicos. EAE Business School da algunas recomendaciones para llevar a cabo esta desintoxicación digital:

  1. Fijarse objetivos realistas: es importante comenzar a estipular tiempo de uso del móvil, se puede empezar quitando unos minutos.
  2. Limita en la configuración de la aplicación el tiempo de uso.
  3. Desactivar las notificaciones del móvil: dejar activadas las que sean de vital importancia, como el tono de llamada para emergencias.
  4. Empezar a construir el hábito de dejar el móvil en una habitación diferente a la que duermes por las noches: esto hará que no se use en tiempo de descanso.
  5. Planear la semana con actividades donde no se requiera teléfono móvil, hacer ejercicio al aire libre es una buena opción.

 

Empezar a implementar hábitos de consumo responsable con el teléfono móvil, permite construir una relación saludable con los aparatos electrónicos.

 

El truco está en encontrar equilibrio entre calidad y cantidad, lo que se denomina como bienestar digital. Utilizar las redes sociales para estar informado y en contacto con tus seres queridos será tiempo de calidad. Un uso excesivo incentiva el descontrol y la absorción” concluye Morillo de EAE Business School.




Millennials y Generación Z, los más afectados por problemas de salud mental

La Generación Z y los Millennials son chicos y chicas que nacieron el siglo XXI. Llamados de muchas maneras: “nativos digitales” porque se mueven en el mundo de las nuevas tecnologías o “generación de cristal – transparente” ya que se consideran frágiles o más sensibles, entre otros nombres.

 

Ahora bien, si hay algo que parece caracterizar a ambas generaciones, son los problemas de salud mental, puesto que pertenecen a esa población que, a pesar, de estar más conectada con otras personas se sienten más solas que nunca generando un incremento en el uso de antidepresivos, asistencia a terapia y expresión auto informada de ansiedad y tristeza entre estos jóvenes.

 

Según un estudio de Unicef sobre la infancia en 2021, entre los problemas de salud mental de mayor frecuencia en América Latina y el Caribe, la ansiedad y la depresión representan el 50% de las afecciones de salud mental entre los menores de 10 a 19 años siendo el suicidio la tercera causa de muerte entre los adolescentes de 15 a 19 años (6 por cada 100.000 muertes).

 

Depresión

Sobre este asunto, Begoña Albalat docente del grado en Psicología de la Universidad Internacional de Valencia (VIU) explica que es la depresión y qué factores influyen a sufrir esta enfermedad.

 

La experta de VIU define la depresión como “un conjunto de síntomas de los cuales se pueden resaltar un estado de ánimo deprimido durante la mayor parte del día, disminución del interés por las actividades que antes provocaban placer, pérdida o aumento de peso, insomnio o hipersomnia, emoción o retraso psicomotor, perdida de energía, sentimiento de inutilidad o culpabilidad excesiva, disminución de la capacidad para pensar o enfoque y pensamientos de muerte recurrentes”.

 

Generación deprimida

Y los factores que podrían estar influyendo en la también llamada “generación deprimida” son:

 

1. Ansiedad social

Puede ser una afección crónica de salud mental sobre todo ahora después de las cuarentenas que trajo la pandemia, donde la soledad de ese momento choca de frente con la vuelta a la vida social provocando muchas veces ansiedad en adolescentes y jóvenes. Estos, sienten que no disfrutan de situaciones sociales con muchas personas y experimentan ansiedad cuando están rodeados de alguien que acaban de conocer.

 

2. Redes sociales

Se han convertido para muchas personas jóvenes en un “refugio” sobre todo cuando no pueden verse con los otros de manera presencial. Sin embargo, hay algunos factores que pueden afectar de manera negativa a los jóvenes:

 

  • El uso excesivo de las redes sociales como evitación de momentos de ansiedad: con el fin de sustituir situaciones sociales en vivo.
  • Un uso sesgado: la imagen que tienen de sí mismos tiene una relación directa con las redes sociales. Es aquí donde se comparan y empiezan, en muchos casos, a odiar sus cuerpos o a anhelar las vidas de los otros, incluso se exponen a publicaciones que muestran expresiones de dolor emocional por parte de personas desconocidas.

 

3. Frustración laboral

La generación Z, como los millennials, se sienten tremendamente frustrados. Ambas generaciones fueron educadas bajo el enfoque del éxito laboral y socioeconómico condicionado al esfuerzo. Los milennials son una generación que se ha esforzado por conseguir sus objetivos de vida, pero con un resultado de frustración en muchos casos.

 

4. Preocupaciones globales

Entre los asuntos que preocupan a las generaciones millennial y Z, están el feminismo, la preocupación por el medio ambiente, los derechos LGTBIQ, entre otros. Son generaciones que se inquietan por lo global y no solo por lo particular, es decir que sienten más ansiedad por particular y no tanto por lo individual. El comunicarse e interactuar por medio de las redes sociales con los demás sobre estos temas los hacen sentir más incluidos y comprendidos por sus iguales.

 

5. Mayor reconocimiento de los propios síntomas

Una de las razones por las que se habla más de depresión y ansiedad en estas generaciones es que las personas que la sufren hablan con más naturalidad sobre ello y reconocen los síntomas. La salud mental es algo común y comentado en las redes sociales por los jóvenes hoy en día.

 

Para Begoña Albalat estas dos generaciones son quienes más reconocen que tienen un problema o que se sienten mal “son quienes han roto el tabú que rodeaba el tema de la salud mental. Ahora son ellos quienes hablan abiertamente sobre ir a terapia, ya que esta es la generación deprimida porque es la generación que reconoce su malestar sin vergüenza ni miedo”.




Salud mental como prioridad de las empresas

La pandemia no solo ha generado una crisis sanitaria y económica en todo el mundo, sino también diversos problemas para la salud mental de las personas, lo cual influye directamente en la productividad de las empresas.

 

El profesor del Máster Universitario en Neuropsicología Clínica de la Universidad Internacional de Valencia – VIU, Joaquín Mateu Mollá, sostiene que los principales problemas emocionales que se generaron fueron depresión y ansiedad; insomnio; fatiga; y estrés postraumático, sobre todo en personas que padecieron la enfermedad o entre quienes perdieron a un ser querido.

 

“Las evidencias científicas apuntan a un incremento en la prevalencia de síntomas depresivos y ansiosos entre la población como consecuencia de los recientes cambios sociales”, explica.

 

El doctor Mateu agrega que otras dificultades adicionales implican la aparición de hábitos no muy saludables, especialmente en la alimentación, que en última instancia repercuten negativamente en el estado de salud y se asocian a problemas como el cansancio físico y mental o la erosión de la motivación

 

Por tanto, propone un decálogo de hábitos a incorporar a la vida cotidiana, entre ellos, procurar mantener actividades de ocio o aprender algo nuevo, limitar el tiempo de conexión con dispositivos electrónicos, interactuar con las personas más cercanas, mantener vínculos sociales con las personas a las que no se puede visitar físicamente y aprovechar la tecnología para ello.

 

Además de seguir hábitos regulares, como alimentarse de forma sana, practicar ejercicio físico, descansar adecuadamente, ser comprensivo con uno mismo y vigilar en lo posible el incremento de conductas poco saludables como el tabaco o el consumo de alcohol.

 

Altos costos laborales

 

Cabe resaltar que una reciente encuesta del Foro Económico Mundial-Ipsos estimó que el costo acumulado proyectado de la pérdida de productividad asociada con la angustia psicológica, las hospitalizaciones y el suicidio durante el periodo 2020-2025 llegaría a los US$ 114.000 millones.

 

El estudio también señaló que más de la mitad (56%) de los adultos que trabajan experimentaron ansiedad relacionada con su seguridad laboral y estrés debido a cambios en sus patrones de trabajo.

 

Asimismo, para el 55% fueron estresantes los cambios en las rutinas laborales, y casi la mitad de los encuestados se sentía solo y aislado trabajando desde casa. Todo ello generó que a un 40% le fuera difícil hacer el home office y, por tanto, disminuyó su productividad y hubo ausentismo en un 30% de los adultos empleados.

 

Más del 50% de limeños con estrés

 

De otro lado, el más reciente estudio epidemiológico del Instituto Nacional de Salud Mental (INSM), del Ministerio de Salud (Minsa), señaló que, en Lima Metropolitana, el 52,2% de la población sufre de estrés de moderado a severo y el 54,6% de limeños ha presentado problemas para dormir, causado principalmente por los problemas de salud, económicos o familiares a consecuencia de la COVID-19.

 

Así, diversas investigaciones en todo el mundo indican que las consecuencias de esta pandemia han sido castatróficas para la salud mental de la población. Ante ello, el área de Recursos Humanos y Gestión de Personas de las empresas tiene un rol fundamental en este acompañamiento a los trabajadores, para ayudarlos a reducir estos efectos.

 

Rápida adopción del home office

 

En ese sentido, la subdirectora de Gestión Humana de Claro Perú, Roxana Ávalos, refiere que la rápida acción de la compañía ha sido fundamental para reducir el estrés desde el inicio de la emergencia.

 

Tomando como prioridad la preservación de los puestos de trabajo, Claro transformó algunos puestos para el home office, buscando compensar el trabajo que no podían ejecutar los colaboradores de atención presencial por el cierre de los centros de atención.

 

De esta manera, para los colaboradores que realizaban labor presencial, el staff de médicos ocupacionales ha sido un aliado estratégico en todo el proceso. En el caso de los colaboradores que realizaban labores remotas, Ávalos explica que se incrementó la comunicación y se compartieron experiencias con los jefes para ayudar en su liderazgo de equipos remotos.

 

Acompañamiento psicológico

 

La ejecutiva de Claro agrega que el acompañamiento psicológico y emocional formó parte de las iniciativas que implementaron.

 

“Vernos vulnerables en este contexto, ser víctimas de contagio o haber perdido un familiar cercano nos afectó a todos. Por ello, buscamos el apoyo de especialistas para brindar la asistencia necesaria a nuestros colaboradores. Los casos de pérdida de un familiar cercano nos quiebran a todos, así que creamos una ceremonia para despedir a nuestros seres queridos con un especialista”, comenta.

 

De igual manera, anota que la creación de espacios sociales virtuales también ha contribuido a interactuar cercanamente con los trabajadores.

 

“A pesar del contexto adverso, de cambios y de riesgos, los colaboradores han mostrado una tremenda solidaridad, alto grado de compromiso y resiliencia para afrontar con valentía los reveses, lo que se ve materializado en productividad y resultados favorables como organización”, precisa la subdirectora de Gestión Humana de Claro Perú, Roxana Ávalos.

 

Por ello, añade que uno de los grandes desafíos dentro de la perspectiva de trabajo virtual, es desarrollar un liderazgo de equipos remotos que no ponga en riesgo el sentido de pertenencia con la organización, que permita que los colaboradores desarrollen autonomía como mecanismo de desarrollo y que ello les permita sentirse a gusto, mientras la organización no se vea afectada en su productividad.

 

Centro de Apoyo Integral

 

Por su parte, el gerente de Marketing de Relacionamiento de Natura, Renzo Ibañez, señala que, además de promover el trabajo remoto para todos los trabajadores administrativos y reforzar las medidas de higiene y seguridad en sus centros de distribución, crearon un programa de telemedicina y recursos de apoyo de salud mental.

 

En el caso particular de las consultoras, algunas innovaciones que desarrollaron fueron la Revista Digital Interactiva; los entrenamientos virtuales, ahora disponibles en un nuevo canal de YouTube; la asesoría virtual de atención, disponible 24/7; el App y site Mi Negocio y la herramienta Mis Posteos, para generar contenido para redes sociales; además de showrooms virtuales y webinars; entre otras.

 

“Para las consultoras de regiones más vulnerables o que tuvieron resultado positivo en sus pruebas de COVID-19, Natura les ofreció flexibilidad de crédito, con condiciones de pago y recursos adicionales”, apunta Ibañez.

 

Uno de los proyectos más importantes de la compañía cosmética fue la creación del Centro de Apoyo Integral para Consultoras y Representantes (CAI). Así, desde julio de este año, Natura&Co (Avon y Natura) brinda orientación médica y psicológica virtual y través de la central telefónica en los 14 países de Hispanoamérica en los que opera, beneficiando a 1,6 millones de personas, de las cuales 200.000 son de Perú.

 

“Las líneas exclusivas para representantes Avon y consultoras Natura que atraviesen una situación de vulnerabilidad debido al impacto del COVID-19 están disponibles las 24 horas y los 7 días de la semana, y son atendidas por equipos profesionales médicos, psicológicos y asistentes sociales”, resalta Renzo Ibañez.

 

Según el gerente de Marketing de Relacionamiento de Natura, las consultoras y representantes han recibido muy bien todas estas iniciativas, pues en la evaluación anual que se realiza a las consultoras, el índice de satisfacción de 2020 pasó de 94% a 95,5% en los países de Hispanoamérica.

 

“La satisfacción es uno de los datos que integra el índice de lealtad, que considera la intención de continuar la relación con Natura y la probabilidad de que la consultora recomiende la empresa a otras personas”, asegura.