Contracción económica golpea al empleo peruano
La caída de la inversión privada y del consumo, sumada a las contrarreformas regulatorias laborales, también ha afectado a la generación de nuevos puestos de trabajo durante este año.
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Por Igor Ybáñez
La contracción económica en el Perú ha dejado su huella en el mercado laboral durante este año, afectando la generación de empleo. Datos del Instituto Peruano de Economía (IPE), basados en la Encuesta Permanente de Empleo Nacional (EPEN), revelan que alrededor de 125 000 personas perdieron su empleo en los primeros nueve meses de 2023, indicando un notorio deterioro.
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Ante este panorama, Óscar Chávez, jefe del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial (IEDEP) de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), señala que la caída del Producto Bruto Interno (PBI) en el segundo y tercer trimestre del año, junto con los factores climáticos impactaron en el comportamiento del empleo en el interior del país, donde se registró un acentuado descenso de la población ocupada.
“Hay que tener presente que la Encuesta Permanente de Empleo Nacional que publica el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) abarca trabajadores tanto del sector formal como informal y los resultados negativos corresponden a este último sector”, sostiene el economista. Detalla que los sectores más afectados en términos de población ocupada son Construcción, Manufactura y el Agropecuario.
El INEI, que realiza su encuesta en 26 ciudades peruanas, destaca que en once, la tasa de desempleo se ha duplicado respecto al 2022. Además, en nueve ciudades, la tasa de desempleo supera el promedio nacional del 6.7 %.
No obstante, Chávez explicó que debido a la recesión, el empleo formal privado se ha desacelerado y crece a tasas muy bajas en comparación del año pasado.
«El empleo formal hace un año subía a tasas del 7 %, ahora solo crece por debajo del 3 %», añadió.
Deterioro por caída de demanda interna y reformas laborales
Luis Miguel Castilla, exministro de Economía y jefe de Videnza Instituto, añade que el deterioro del mercado laboral se debe a la caída de la demanda interna en los últimos tres trimestres de 2023.
“Este año se ha visto caída de la inversión privada y de la pública. Esto explica por qué el empleo no se ha estado generando en el país, lo que corresponde evidentemente a la recesión que estamos viviendo. Asimismo, el consumo privado prácticamente tendrá un crecimiento nulo en lo que va del año”, añade el economista.
Además, Castilla sustenta que la pérdida de confianza empresarial, evidenciada en las encuestas del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), y las contrarreformas laborales contribuyen a este escenario.
“Parte de esto responde justamente al retroceso que hubo en materia regulatoria, incluida la legislación laboral que se ha hecho más rígida, y la mayor fiscalización por la que ha optado la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) y una serie de medidas administrativas que han trabado el inicio de muchos proyectos de inversión privada. También, el encarecimiento del crédito y sus altos costos financieros, especialmente a nivel de las empresas medianas, afecta a la dinámica de la inversión”, comenta el exministro.
Los más vulnerables
Chávez enfatizó que los jóvenes, especialmente aquellos de 14 a 24 años en zonas rurales, son los más vulnerables al desempleo. Castilla coincide, destacando que los jóvenes menores de 25 años, principalmente en sectores como Servicios y Comercio, enfrentan dificultades para encontrar empleo formal. Además, sostiene que el próximo año saldrán nuevos egresados de diferentes universidades, y será para ellos un poco más difícil encontrar un empleo formal.
Reforma laboral
Ante la precariedad del empleo en nuestro país, Mario Pasco, presidente de la Comisión de Asuntos Laborales de la CCL, señala que el deterioro de las expectativas empresariales se debe a que los gobiernos de los últimos años no han logrado generar un ambiente favorable y amigable para las inversiones, que es la única fuente orgánica de empleo.
“Las manifestaciones son múltiples, pero pongo en relieve dos. Primero, los políticos, líderes y formadores de opinión han demonizado al empresario privado, presentándolo como un explotador y no como un generador de oportunidades y prosperidad. Segundo, la normativa laboral ha maltratado progresiva y sostenidamente al empleador formal y casi le ha invitado a la informalidad laboral”, enfatiza el experto laboralista.
Pasco también señala que las contrarreformas laborales impulsadas por el Congreso y el Ejecutivo han afectado a la generación de nuevos puestos de trabajo y hoy se están viendo los resultados con el deterioro del empleo.
“Pero, el origen no es solo la norma contra la tercerización, que fue la manifestación más violenta de la tendencia, sino todo el desmantelamiento del sistema legal laboral peruano por múltiples vías normativas, pero también por acción de la autoridad administrativa de trabajo y la justicia laboral”, acotó.
Medidas y proyecciones para la recuperación
Sobre las medidas para impulsar el empleo en el país, el representante del gremio empresarial comentó que, desde la CCL, han presentado propuestas para impulsar la formalización del empleo, las cuales han sido sustentadas en diferentes mesas de trabajo.
“Esperamos que, en la actual coyuntura, dichas iniciativas, que favorecerían la formalidad sin afectar beneficios, encuentren mejor recepción en los hechos. En el pasado hemos recibido siempre opiniones óptimas, pero no acción desde las instancias que pueden emitir la legislación”, advierte el abogado.
Adicionalmente, el presidente de la Comisión de Asuntos Laborales de la CCL señala que se debe retomar la propuesta de ley de empleo juvenil que promueve que más personas accedan a un puesto de trabajo formal, capacitación y salarios acordes al mercado.
A su turno, el jefe del IEDEP, Óscar Chávez, advierte que se necesita mayor inversión, tanto privada como pública, para generar empleo permanente y mejores ingresos para los trabajadores.
“La reactivación económica fomentará el empleo formal e informal”, anota.
Por su parte, el jefe de Videnza Instituto, Luis miguel Castilla, señaló que con una potente política fiscal expansiva y la aplicación de las 25 medidas del “Plan Unidos” el Gobierno podría reactivar los sectores económicos y el empleo.
“Una vez superado el fenómeno de El Niño, a partir del segundo semestre del próximo año, los trabajos de reconstrucción pueden significar un acelerador de la inversión y esto podría ayudar a la actividad productiva”, argumenta.
Castilla también indica que el Gobierno debe dar señales de confianza para mejorar las expectativas empresariales.
“La inflación en el rango meta también va a ayudar a estimular el consumo. Además, se necesita mayor estabilidad en lo político y en lo institucional, cosa que lamentablemente no está funcionando. Finalmente, se deben promover temas en simplificación administrativa e impulsar la inversión pública con el mejor gasto de los gobiernos subnacionales es fundamental”, concluyó el exministro de Economía y Finanzas.
Datos
Empleo: Según el IPE, el empleo cerrará el 2023 con una caída del 0,7 %, el mayor retroceso en los últimos 20 años.
Proyección: IEDEP proyecta una baja tasa de crecimiento del PBI de 2,6 % para 2024, con sectores intensivos en mano de obra como el Agropecuario y Construcción, que apenas crecerían 2,3 % y 3,6 %, respectivamente.
Recuperación. Según el IEDEP, en 2024, el empleo puede recuperarse a través de otras actividades como comercio y servicios, que son la principal fuente de ocupación en el sector formal de la economía.
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La caída de la inversión privada y del consumo, sumada a las contrarreformas regulatorias laborales, también ha afectado a la generación de nuevos puestos de trabajo durante este año.