Rosa Bueno: Necesitamos recuperar la fe en el futuro

El próximo 28 de julio nos encontrará en un desgobierno total. Las denuncias en contra del presidente Pedro Castillo y su entorno cercano siguen creciendo. A las denuncias realizadas por el ex ministro del Interior, se suman los reglajes a algunos colaboradores eficaces. Un claro intento de amedrentamiento. Estos hechos afectan la administración de justicia, dado que dificultan las investigaciones y corroboran las denuncias del exministro.

Tuvimos la oportunidad de escuchar las respuestas que dio Yenifer Paredes a la Comisión del Congreso que la investiga por ofrecer indebidamente obras públicas para que las ejecute la empresa en la supuestamente trabaja. Ella afirma ganar S/ 1.500, no estar en planilla y recibir el dinero prácticamente a la mano, y aún así defiende su derecho al trabajo. Que paradójico, (si la versión dada fuera cierta) el gobierno que preside su cuñado habla de generar empleo de calidad para los peruanos y es incapaz hacerlo, pues insisten en restringir la tercerización, entre otros desaciertos en materia laboral que generarán más desempleo e informalidad. La cuñada que fue criada como hija se conforma con un trabajo informal.

Tanto el presidente Castillo como el premier Aníbal Torres insisten en minimizar las denuncias que se realizan. No dan explicaciones creíbles de los hechos y, lo que es más grave, no generan las condiciones para que las autoridades realicen su trabajo. Así, a su falta de liderazgo para gobernar se suma la poca voluntad de liderar la lucha anticorrupción.

Por su parte, el Congreso no ha logrado utilizar las herramientas constitucionales para enderezar los desaciertos del Ejecutivo y cumplir de manera eficiente su labor de fiscalización. El último año los congresistas nos han dejado leyes populistas y muy poco responsables que buscan complacer a sus votantes, en el mejor de los casos, antes que crear las condiciones mínimas que nos permitan reactivar la economía, generar empleo, mejorar la educación o impulsar la inversión. Esto los convierte en cómplices del desgobierno que denunciamos.

Hasta el cierre de la presente columna, vemos cómo las bancadas están poniendo por delante sus intereses personales y no logran coordinar una lista única para que la mesa directiva, sea integrada no solo por personas honestas, calificadas, con manejo político, sino que además logre unir a los peruanos.

Para demostrar la falta de liderazgo del gobierno pensaba enumerar los ejemplos que lo acreditan, pero los peruanos estamos cansados, sí señores, cansados de vivir y de escuchar el rosario de populismo, ineficiencia y corrupción que nos aqueja.  Se los ahorro.

La semana que pasó diferentes colectivos y gremios empresariales, entre ellos la Cámara de Comercio de Lima (CCL), hablaron alto y claro contra el desgobierno y la corrupción. Esperemos que el presidente nos escuche y nos dé una sorpresa el 28 de julio. Una decisión generosa y altruista que saque de la desesperanza a la población.

Necesitamos recuperar la fe en un futuro mejor. Por ello, no quisiera cerrar esta columna sin felicitar a Kimberly García. Ella hizo historia al ganar no una, sino dos medallas de oro para el Perú en el Mundial de Atletismo. Gracias Kimberly. Ojalá nuestros políticos fueran como tú.