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Manufactura y construcción muestran progresiva recuperación

La actividad económica de transformación es aquella que modifica productos obtenidos de materias primas para la satisfacción de necesidades de una sociedad. Son dos sectores económicos los que se incluyen en la actividad de transformación, Manufactura y Construcción, que en conjunto aportaron el 18,2% del PBI en el 2020.

 

El sector manufactura

 

El Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) clasifica al sector manufactura en dos grandes grupos: (i) el subsector fabril primario, que representa el 24,5% del total del sector; y (ii) el sector fabril no primario, que representa el 75,5% restante, compuesto por bienes de capital, de consumo e intermedios.

 

La Manufactura es el sector con la mayor participación en el PBI y que alcanzó el 12,5% en el 2020. Asimismo, concentra el 14,4% del empleo formal, según cifras del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE). Dicho sector tuvo, en el 2020, la mayor caída (-13,4%) en cien años, solo superada por las registradas durante la hiperinflación de 1989 (-15,7%) y el Fenómeno del Niño de 1983 (-18,1%).

 

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Tras la profunda contracción del segundo trimestre del 2020 ocasionada por las medidas extremas de contención de la pandemia, el sector Manufactura logró registrar dos meses consecutivos de crecimiento desde que empezó esta crisis. En diciembre del 2020 registró un alza del 9,2%; mientras que en enero del 2021 fue de 7,0%.

 

Ello explicado por el subsector primario, específicamente por el importante aumento de la industria procesadora de pescado. Sin embargo, en el mes de febrero volvió a caer en 1,3%.

 

Subsectores en expansión y recesión

 

La industria manufacturera incluye nueve actividades específicas siendo las más importantes las industrias alimenticia, química, metálicas básicas, y textil y del cuero.

 

Considerando la información disponible para el trimestre diciembre 2020 a febrero 2021, se observa que la manufactura primaria ha crecido en 18,6%, registrando un crecimiento exponencial en la producción de harina y aceite de pescado (158,4%) y la de conservas y productos congelados de pescado (25,7%).

 

En lo que respecta a la manufactura no primaria, los rubros que han mostrado una importante recuperación en el trimestre analizado son cerveza y malta (27,5%), muebles (41,4%), fibras artificiales (29,6%) y cuerdas, cordeles y redes (18,1%).

 

No obstante, mientras la manufactura primaria muestra un crecimiento de 18,6% en el trimestre analizado, la manufactura no primaria tuvo una contracción de 1,1%. Las mayores caídas se encuentran en la producción de cuero (-56,1%), calzado (-38,7%), actividades de impresión (-29,2%) y tejidos y artículos de punto (-27,9%).

 

Primer trimestre en positivo

 

En marzo del 2020, la caída de la manufactura llegó al 32,2% producto de las medidas de confinamiento total aplicadas desde la segunda quincena de dicho mes. Pese a la caída de febrero en 2021, el IEDEP proyecta un crecimiento del sector de 9,2% para el primer trimestre del 2021, en parte por un efecto de rebote estadístico por la performance de marzo del año pasado.

 

Refuerza esta proyección la recuperación en la recaudación tributaria, la cual se incrementó en términos reales en febrero (13,1%) y marzo (10,5%).

 

Dentro de la manufactura primaria, por ejemplo, destacan los mayores tributos internos captados de la producción de azúcar (214,2%) y, en la manufactura no primaria, la recaudación proveniente de actividades como textil, cuero y calzado creció en 79,2%, mientras que la de productos químicos, caucho y plástico aumentó en 41,6%.

 

A esto se suma el mayor crédito dirigido al sector. Según cifras de la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS), la expansión del crédito del sistema financiero a la manufactura al mes de febrero llegó a 9,7%. Los préstamos se concentran en un 95,6% en la banca múltiple y un 3,1% a través de las cajas municipales.

 

Sector construcción

 

El sector Construcción aportó el 5,7% del PBI 2020 y tuvo seis meses consecutivos de caída debido a las medidas de contención contra la COVID-19.

 

Los resultados no pudieron ser peores en el 2020: marzo (-46,3%), abril (-89,7%), mayo (-66,4%) y junio (-44,6%). No obstante, a partir de setiembre se empezaron a registrar tasas positivas de crecimiento hasta llegar a un 15,2% en enero y 14,3% en febrero del 2021.

 

El mayor consumo interno de cemento dentro del plan de reactivación económica y la mayor inversión pública en todos sus niveles de gobierno son los factores que han impulsado a dicho sector. Así, durante el primer trimestre del presente año se observó un fuerte impulso de la inversión pública nacional (75,1%), regional (17,1%) y local (56,3%).

 

Esta rápida recuperación ha permitido que en Lima Metropolitana el empleo en el sector Construcción se incremente en 4,8% durante el primer trimestre del presente año, siendo la única actividad económica en donde creció el empleo. Las cifras a nivel nacional al último trimestre del año pasado contabilizan también una expansión en el empleo de 1%.

 

Trimestre positivo para la construcción

 

La proyección de crecimiento del sector Construcción para el primer trimestre del presente año es de 41,3%, como ya se ha explicado por un rebote estadístico tomando en cuenta la drástica caída del sector desde marzo del 2020. Hay que tomar en cuenta que el crédito dirigido a dicho sector se ha incrementado en 43,9% con cifras a febrero 2021 según la SBS.

 

Al igual que lo visto en Manufactura, el crédito a la Construcción se concentra en la banca múltiple (88,2%) y cajas municipales (8,7%). Además, se observa una fuerte expansión del crédito al sector en el último año por parte de las cajas rurales (48,8%) así como de la banca múltiple (45,0%) y cajas municipales (44,6%).

 

Por otra parte, la recaudación tributaria aportada por el sector ha logrado un incremento en términos reales en los meses de febrero (3,0%) y marzo (58,5%), luego de doce meses de caída desde marzo de 2020.