Economía peruana no crecería lo suficiente el 2022

El reciente 2021 nos mostró los beneficios del crecimiento económico. La esperada reactivación, estimada en alrededor de 12,8% luego de la mala performance 2020 en el PBI (-11,1%), permitió incrementar, en un año, la presión tributaria de 13,3% a 16,2% del PBI, reducir el déficit fiscal de 8,9% a 3,1% del PBI e incrementar el empleo formal en 3,5% entre enero y octubre del 2021, además de generar los recursos para financiar programas de transferencias monetarias que han beneficiado a 13,5 millones de personas.

 

Sin duda, la reducción de la pobreza es la tarea pendiente. Esta llegó al 30,1% de la población en 2020 y para reducirla se necesitará de un crecimiento sostenido, y no de un solo año, para ubicarla al menos en los niveles de prepandemia (20,2%).

 

Pasada la reactivación económica, el IEDEP proyecta para el 2022 un incremento del PBI de 3,1%, tasa moderada considerando el nivel de pobreza vigente. Como se sabe, las transferencias monetarias solo son medidas para apaciguar, pero están lejos de erradicar la pobreza.

 

La desaceleración económica es notoria, pues, según información de Bloomberg, las proyecciones de crecimiento económico del Perú para el primer y segundo trimestre del 2022 serían de 2,3% y 2,7%, respectivamente.

 

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PBI por el lado del gasto

 

Obviando los años 2020 y 2021 por ser atípicos, la población económicamente activa (PEA) se incrementa año a año en alrededor de 300.000 personas, lo que equivale a decir que se necesitan crear poco más de 800 puestos de trabajo diarios para que esta población no quede desempleada. Para esto se necesita una mayor inversión privada que genere empleo formal y estable.

 

Los periodos de crecimiento económico superior al 5% han sido acompañados de expansiones de la inversión privada a tasas superiores al 7%. Sin embargo, para el 2022 la proyección de inversión privada es de apenas 0,6%, con lo cual se corre el riesgo de un mayor desempleo o incremento del empleo informal.

 

En lo que respecta a la inversión pública se proyecta un crecimiento de 5,3%, tomando en cuenta que el 2022 es un año electoral donde se realizarán elecciones municipales y regionales, lo que incentivará y acelerará la ejecución de obras públicas.

 

El consumo privado, que equivale a más del 60% del PBI y que durante el 2021 fue impulsado por medidas extraordinarias como los retiros de AFP y la CTS, así como por los bonos entregados a la población en condiciones de vulnerabilidad, ya no contará con dichos beneficios durante el presente año.

 

El IEDEP proyecta un crecimiento de 3,5% para el 2022, tomando en cuenta que el empleo formal y la masa salarial se vienen recuperando.

 

En lo que respecta a las exportaciones, la expansión del producto de nuestros principales socios comerciales como EE.UU. y China, sumado a la evolución favorable de los precios internacionales de minerales, llevaría a un crecimiento de las exportaciones de 7,2% durante el presente año.

 

PBI por sectores económicos

 

El 2021 se caracterizó por el fuerte impulso del sector secundario o de transformación conformado por la manufactura y construcción, quienes lideraron el crecimiento del año culminado. Para el 2022 el panorama cambiará, llegando a una expansión de apenas 1,8%, dado que no hay forma de sostener un alto crecimiento en dichas actividades.

 

En lo que respecta al sector Construcción, el consumo interno de cemento en los meses de octubre y noviembre registró tasas mínimas de 0,63% y -1,33%, respectivamente.

 

De otro lado, la actividad manufacturera apenas creció en 0,85% en octubre y la producción de electricidad en noviembre y diciembre, que está asociada al desempeño de dicho sector, fueron de las más bajas registradas desde el inicio del periodo de rebote estadístico en marzo del 2021.

 

Para el presente año 2022 se proyecta que las actividades de manufactura y construcción crecerían en 1,9% y 1,6%, respectivamente.

 

En cambio, el sector primario o extractivo sería el de mayor crecimiento (5,1%) donde se agrupan la actividad agropecuaria (3,2%), pesca (4,2%) y minería e hidrocarburos (6,1%) fomentados por las expectativas de crecimiento tanto del consumo privado, las exportaciones y la mejora en los términos de intercambio.

 

Finalmente, el sector terciario tendrá una performance positiva, expandiéndose en 4,4%.

 

Las actividades del comercio (3,9%) y servicios (4,6%), sumado a la minería e hidrocarburos, son las que aún se encuentran por debajo de los niveles de producción prepandemia. El sector terciario, sobre todo, es afectado por las medidas focalizadas para enfrentar la pandemia de la COVID-19, tales como el límite de aforos, que no les permite operar al 100% de su capacidad.

 

Bajo medidas adecuadas de control de pandemia y con un mayor porcentaje de la población con tres dosis, que a la fecha ya supera el 10%, se lograría un mayor crecimiento del sector terciario que es la principal fuente de empleo formal a nivel nacional.

Economía mundial

El PBI mundial para el 2022 reduciría en un punto porcentual el crecimiento estimado para el 2021, pasando de 5,9% a 4,9%. Pese a ello, el PBI de nuestros principales socios comerciales superará en crecimiento al proyectado para Perú en el presente año.

 

Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), en el caso de los países avanzados, el crecimiento para el 2022 de 4,5% estaría liderado por EE.UU., con una expansión de 5,2%.

 

En el caso de las economías emergentes y en desarrollo, el crecimiento llegaría al 5,1% gracias a la expansión de India (8,5%) y China (5,6%).

 

La región con menor crecimiento para el presente año será América Latina y el Caribe (3%), incluso por debajo de África Subsahariana (3,8%).