Transformación digital y mayor conectividad son los grandes retos pospandemia

El presidente ejecutivo del Osiptel, Rafael Muente, remarcó la necesidad de fortalecer la conectividad para la continuidad de la productividad, especialmente en contextos de crisis global, como la provocada por el COVID-19.

 

“El desafío para los países latinoamericanos es proveer mayor conectividad en áreas rurales, cerrando las brechas existentes a través de distintas estrategias y planes de desarrollo de los servicios de telecomunicaciones en el ámbito nacional”, apuntó.

 

Así lo manifestó durante su participación en el panel sobre regulación inteligente para el desarrollo de la economía digital en el evento denominado Digital Innovation Day, que reunió de manera virtual a los representantes de los organismos reguladores de Latinoamérica.

 

En representación de Regulatel (Foro Latinoamericano de Entes Reguladores de Telecomunicaciones), Muente analizó el estado actual de la conectividad en la región y cómo la crisis sanitaria producto de la pandemia marcó el año 2020.

 

Transformación digital

 

Frente a las necesidades actuales del mercado y los nuevos retos planteados productos de la pandemia por la COVID-19, el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel) se encuentra en proceso de generar una transformación digital en la interacción entre las empresas operadoras y los usuarios, así como en el fortalecimiento de su labor fiscalizadora.

 

“Hemos tenido que acelerar el paso a una serie de formas de actuación que usen medios digitales, no presenciales, como la supervisión o fiscalización, y por supuesto la necesidad de empujar a la industria para que tomen decisiones con mayor rapidez y desarrollen inversiones para una mejor atención a los usuarios”, destacó Muente.

 

En ese sentido, señaló que el Osiptel ha desarrollado herramientas que buscan empoderar a los usuarios y dotarlos de mayor y mejor información, como Checa Tu Plan o los rankings que miden el desempeño de las empresas operadoras.

 

“Esto permite que la toma de decisiones de los usuarios genere mayor competencia, sin que esto resulte una regulación en sí, pues premian a quienes le brinden el mejor servicio”, indicó.

 

Nuevos retos

 

La pandemia ha generado enormes retos y un sentido de urgencia en el sector, que coincide con la agenda regulatoria del Osiptel.

 

“En un país como Perú, donde existe un gran mundo rural y una geografía compleja, se requieren de soluciones importantes, pues el reto es dotar con banda ancha a los más de 120 mil centros poblados existentes”, señaló.

 

Muente refirió que se necesita de un Estado que genere inversión, pues este gran reto no lo puede lograr solo el sector privado.

 

Afirmó que, en esta nueva coyuntura, los países latinoamericanos enfrentan los mismos retos y coinciden que la prioridad es que la conectividad llegue a más gente, pero con eficiencia y sustentabilidad del modelo regulatorio.

 

Por ello advirtió la necesidad de evitar iniciativas que busquen romper con la autonomía de los reguladores en Latinoamérica, como injerencias políticas o normativas no emitidas por estos organismos especializados, pues se podrían generar efectos contrarios a lo que el sector y la población necesita.