SBS: El 52% de adultos tiene una cuenta en el sistema financiero

El porcentaje de adultos con una cuenta en el sistema financiero al segundo trimestre de 2021 fue de 52%, superando en 10 puntos porcentuales lo reportado en el año 2020 (42%), informó la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS).

 

“Esta importante mejora está asociada principalmente con el crecimiento de las transacciones digitales y particularmente, por la apertura de cuentas por parte del sistema financiero para facilitar la entrega de los beneficios otorgados por el Estado en el marco de la pandemia del Covid-19”, sostuvo Socorro Heysen, la Superintendenta de Banca, Seguros y AFP.

 

La funcionaria participó en la inauguración del Congreso Internacional de Inclusión Financiera “Los retos de la inclusión financiera para las poblaciones más vulnerables”.

 

Este evento organizado por la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (AFP), el Consejo Mundial de Cooperativas de Ahorro y Crédito (WOCCU, por siglas en inglés) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), tiene como objetivo compartir las experiencias y lecciones aprendidas para facilitar la inclusión financiera de las poblaciones más vulnerables en América Latina, con la participación de expertos nacionales e internacionales.

 

Banca digital

 

También, destacó el dinamismo que viene observando la innovación tecnológica en el sistema financiero, lo que se ha reflejado en el incremento del número de operaciones a través de la banca digital -se triplicó entre marzo de 2020 y agosto de 2021- y en el creciente uso de las billeteras electrónicas por parte de la población.

 

Así, YAPE, cuenta a la fecha con más de siete millones de usuarios, PLIN con alrededor de cuatro millones y BIM con 1.3 millones.

 

En este contexto, precisó, la SBS, como regulador y supervisor financiero, ha respondido con un marco regulatorio que facilita la inclusión financiera a través del uso de los servicios financieros digitales, buscando el equilibrio entre inclusión, estabilidad, integridad y protección financiera.

 

Recientemente, agregó, la SBS aprobó una norma para el desarrollo temporal de actividades en modelos novedosos e implementó mecanismos de protección al consumidor en el contexto de una creciente digitalización.

 

Asimismo, en el marco de la solicitud de facultades delegadas, enviada al Congreso de la República, se ha propuesto modernizar la Ley General del Sistema Financiero con el objetivo de facilitar la existencia de entidades 100% digitales, entre otras reformas.

 

En educación financiera también se han dado avances. “Tan importante como la inclusión, es que esta se realice de manera responsable para que sea permanente. De acuerdo con la encuesta de capacidades financieras, se observan mejoras en los niveles de educación financiera de los peruanos entre 2013 y 2019. La última muestra que el 62% de los peruanos logró acceder a una adecuada educación financiera”, precisó.

 

El escenario actual ha evidenciado la importancia de la educación financiera para el ciudadano, constituyéndose en la primera línea de defensa en su proceso de inclusión financiera responsable. La adquisición de conocimientos, desarrollo de capacidades y actitudes para manejar adecuadamente sus finanzas personales, permitirá ejercer sus derechos y cumplir con sus responsabilidades al momento de adquirir y usar los productos y servicios financieros.

 

La PNIF y los retos

 

La Superintendenta de Banca, Seguros y AFP destacó que todos estos avances han sido resultado de un esfuerzo articulado y del compromiso asumido por diversas instituciones públicas y privadas en el marco Política Nacional de Inclusión Financiera (PNIF), herramienta de política pública que direcciona y articula los esfuerzos de múltiples instituciones del Estado en busca de mejorar el bienestar económico de la población a través de su inclusión en un sistema financiero formal.

 

Sin embargo, a pesar de estos avances, aún se enfrentan retos, como cerrar la brecha en la tenencia de cuentas entre el ámbito rural y urbano, la cual se incrementó de 17% a 22% entre el 2020 y 2021. En el segundo trimestre de 2021, el 56% de los adultos del ámbito urbano tenía alguna cuenta en el sistema financiero, porcentaje que se reduce a 34% para los adultos en el ámbito rural.

 

Esta situación que se atribuye tanto a la distancia a un punto de acceso físico, así como a las dificultades derivadas de la infraestructura (baja conectividad) y de la reducida habilidad en el manejo de las herramientas digitales.

 

En ese sentido, es necesario que la industria desarrolle productos y servicios financieros acordes a las necesidades de la población, y continuar con el esfuerzo de alfabetización financiera y digital en la población.