Renzo Reyes: Ecosistema de innovación peruano, ¿cómo vamos?

Los efectos de la COVID-19 han generado una ola de nuevos hábitos en nuestra forma de vivir, de relacionarnos con otros y hasta de pensar.

 

Es de esperarse que este nuevo escenario también impacte en la forma en cómo hacemos negocios y en cómo se interrelacionan los distintos actores de nuestra economía. Específicamente, hablamos del ecosistema de innovación peruano.

 

Un ecosistema de innovación es el ese espacio donde confluyen emprendimientos innovadores (principalmente de base tecnológica), consultores, universidades, corporaciones, Gobierno, entre otros, en pos de desarrollar una oferta y demanda de productos y servicios que satisfacen nuevas necesidades, otorgando a este mucho valor agregado.

 

Un buen termómetro para ver cómo vamos es analizar el destino de la inversión privada que se ha realizado a través de las redes de ángeles o fondos de capital de riesgo.

 

Según la Asociación Peruana de Capital Semilla y Emprendedor (PECAP), en el 2020 se ha invertido un promedio de US$ 46 millones en emprendimientos innovadores, lo cual representó un crecimiento de 2,2 veces comparado con el 2019.

 

Sin embargo, el número de emprendimientos en los cuales se invirtió se redujo en 65% comparando ambos años. Es decir, las inversiones han crecido, pero han estado enfocadas en un número limitado de emprendimiento y/o sectores.

 

La pandemia ha funcionado como “disparador” de sectores que tenían un crecimiento lento. ¿Cómo se han distribuido estos US$ 46 millones invertidos durante el 2020? El orden va así: Edtech (40%), e-commerce (27 %), fintech (18 %) HR Tech (7 %) y otros (9 %).

 

Si comparamos estos mismos sectores con los resultados del 2019, vemos que el sector de mayor crecimiento en nuestro ecosistema es el de e-commerce, pasando de 7% en el 2019 a 27% en el 2020; es decir, el sector creció casi cuatro veces de un año a otro.

 

El segundo sector con mayor crecimiento es el de las edtech, pasando de 25% a 40% en concentración de inversión privada. ¿Qué papel tiene el Gobierno en toda esta ecuación? Uno muy importante, si reconocemos que tiene o ha tenido un rol fundamental en la “activación” de los principales ecosistemas del mundo.

 

Si bien StartUp Perú, política pública de inversión en emprendimientos innovadores de Innóvate Perú, no ha lanzado convocatoria durante el 2020 y lo que va de este año, sus siete primeras generaciones permitieron que emprendimientos como Crehana, Joinnus o Chazki obtuvieran el capital semilla que les permitió crecer.

 

El Fondo de Capital para Emprendimientos Innovadores (FCEI), aprobado el año pasado, promete continuar dinamizando nuestro ecosistema. Solo esperemos que estos fondos vayan de la mano con normativas y leyes que promuevan el desarrollo de innovación en Perú. El mundo seguirá cambiando y es muy importante aprender a cambiar con él.