Jorge Chávez: se adjudicó construcción de segunda pista de aterrizaje
Se culminó el proceso de licitación y adjudicación para los trabajos del “Lado Aire” del Proyecto de Ampliación del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, para la construcción de la segunda pista de aterrizaje, que es parte de la cartera de obras impulsadas por el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC).
Con esta obra y la pista existente se duplicará la capacidad de operación del aeropuerto. Se podrá realizar hasta 80 operaciones de aterrizaje y despegue por hora. Todo en una superficie que triplicará el campo de vuelo de la operación actual.
“Este gobierno está comprometido con la modernización del aeropuerto Jorge Chávez, que es clave para la reactivación económica del país. La ejecución de las obras generará puestos de trabajos directos e indirectos», sostuvo Carlos Estremadoyro, ministro de Transportes y Comunicaciones.
«En pocos años, los peruanos tendrán a su disposición un aeropuerto con dos pistas de aterrizaje y una nueva torre de control. Este es el resultado del trabajo que hemos realizado y que permitió iniciar la ampliación del aeropuerto después de 15 años”, señaló el ministro.
Selección
Luego de un riguroso proceso de selección, a cargo del operador del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, Lima Airport Partners (LAP), que convocó a 8 consorcios, conformados por reconocidas empresas nacionales e internacionales de comprobada experiencia en el sector aeronáutico y de construcción, se adjudicó la segunda pista de aterrizaje (Paquete 2.2) al consorcio Inti Punku.
Los postulantes presentaron sus propuestas de trabajo en términos de ejecución, capacidad técnica, operativa y de compliance, tomando en consideración los tiempos de construcción y el conocimiento del entorno local.
Asimismo, dado el contexto actual, se sumó como requerimiento la presentación de estrategias de mitigación bajo nuevos estándares de salud y seguridad ante la COVID-19.
El alcance de este paquete de trabajo (paquete 2.2) incluye la construcción de una segunda pista de aterrizaje de 3,480 metros de longitud, una red de más de 10 kilómetros de nuevas calles de rodaje, luces de aproximación, sistemas de balizamiento, ayudas a la navegación, sistemas de media tensión y equipos de control y vigilancia.
Cabe destacar, que el consorcio ganador iniciará labores a partir de septiembre en un área total a intervenir de más de 600 hectáreas. La nueva pista de aterrizaje empezará a operar a finales del 2022.
Logro
Con esta adjudicación se dan por concluidos todos los procesos de licitación del “Lado Aire” que incluye la segunda pista de aterrizaje y la nueva torre de control.
Todos los paquetes de trabajo correspondientes al “Lado Aire” suman un monto de inversión total de USD 400 millones, aproximadamente, por parte del concesionario.
“Estamos orgullosos de continuar con las obras programadas del Proyecto de Ampliación a pesar de la adversa coyuntura que afrontan los sectores aviación y construcción», señaló Antón Aramayo, director del Proyecto de Ampliación de LAP.
«Hemos adjudicado todo el “Lado Aire” que constituye un componente fundamental para la futura operación aérea. La torre de control ya está en construcción y la segunda pista iniciará obras a partir de septiembre», indicó Aramayo.
«En LAP tenemos el compromiso de seguir avanzando para que el Perú pueda contar con uno de los aeropuertos más importantes de Sudamérica”, sostuvo.
Cabe recordar, que a esta nueva adjudicación se suman las realizadas en el 2019, donde 12 contratistas llevaron a cabo los trabajos tempranos, la de diciembre del 2019, donde se seleccionó al Consorcio Nuevo Limatambo para los trabajos de movimiento de tierra, y la de mayo último, que se adjudicó al Consorcio Wayra para la construcción de la nueva Torre de Control.
“Este es un proyecto emblemático para el país, que sin duda traerá beneficios directos para Lima y el Callao, pero que principalmente generará mayores oportunidades laborales para más peruanos en estos momentos de gran necesidad. Se proyecta tener picos de hasta 1,500 trabajadores en campo, aproximadamente; sumados a los casi 800 que trabajan actualmente en las etapas previas de movimiento de tierras y la torre de control”, indicó el ministro Estremadoyro.