Karla Horna: Empresarios de valor

VALOR es una cualidad, virtud y acto sublime que cobra especial protagonismo en periodos de incertidumbre, miedo, crisis y desafíos en general. Es la diferencia entre ser héroe o víctima donde prevalece lo que cada uno decida ser según su escala de valores y con el grado de compromiso con sus sueños o metas personales, incluyendo los fines altruistas que persiga.

 

A este punto es necesario potenciar mi valor como empresario. En este aspecto, adoptaremos la definición VALOR como coraje o valentía para afrontar cualquier desafío, para salir completamente airoso o con menos estragos negativos de la lucha, para poder renacer personal y empresarialmente.

 

El VALOR reside en uno mismo, en lo que uno es y cree firmemente que valdrá la pena luchar, sobre todo todo tomar acción. En este caso sacar adelante la empresa, que es una extensión de nuestro ser y nos representa plenamente como personas y profesionales.

 

En periodos de desafíos se debe potenciar ese valor reafirmándolo y transformándolo en una nueva versión propia y de mi empresa más empática, más humana, más eficiente. Lograrlo no implica necesariamente realizar grandes inversiones.

 

Muchas veces basta un CAMBIO DE ACTITUD para hacer la diferencia en positivo, frente a nuestros colaboradores y su réplica en nuestros clientes.

 

 

Valor como cualidad o virtud

 

Ahora aplicaremos la definición VALOR como cualidad o virtud; es decir lo que esta vinculado con lo considerado apreciado o ideal. Es el DEBER SER EMPRESARIAL.

 

Mi escala de valores como empresario o emprendedor define mi éxito, mi felicidad, mi paz porque la idea de hacer empresa es servir con un bien o servicio que dé satisfacción a mis clientes. Entonces, mientras más excelencia brinde, mi empresa impactara de forma positiva en el ser de mis clientes.

 

De esta manera, se forma un vínculo y una cadena de valor sólida donde la satisfacción del cliente con su compra me consagra como empresario.

 

EMPRESARIOS DE VALOR* une ambos conceptos: coraje y virtud. Todo empresario debe tener VALOR EMPRESARIAL, siendo resiliente transformándose en su mejor versión ejerciendo un impacto positivo en la sociedad.

 

El valor de una empresa radica en el impacto que tiene en EL SER DEL CLIENTE. En ese sentido, es el momento de conectar con más calidad, autenticidad y hacer historia trascendiendo con nuestras empresas sobre todo en crisis, que es cuando se requiere extra humanidad y excelencia.

 

Estamos en pleno cambio mundial, las empresas cobran nuevos protagonismos y deben transformarse rápidamente con más ROSTRO HUMANO.

 

A forjar estrategia, cultura y clima donde prevalezca una CULTURA DE VALOR que sea sinergia entre palabras y acciones, logrando resultados extraordinarios sostenibles.

 

*EMPRESARIOS DE VALOR es un trabajo e iniciativa de la Autora para potenciar el rol creador de los empresarios y emprendedores rumbo al Bicentenario.