Hugo Perea: “Si la confianza no se recupera, la inversión se mantendrá débil”

¿Qué falta para terminar de reactivar la economía peruana?

 

La economía peruana ha estado básicamente experimentando un efecto rebote, recuperar los niveles que tenía antes de la pandemia, como está ocurriendo en todo el mundo. El año pasado la economía peruana se contrajo 11% y este año podría crecer entre 12% y 13%. Expandiéndose a esa magnitud consolidaremos la recuperación de niveles del año 2019. Si bien esto es positivo, hay que ponerlo en contexto. Recuperar lo que tuvimos hace dos años es solamente eso. No hemos avanzado y, por lo tanto, lo importante  es sentar las bases de un crecimiento vigoroso a partir del próximo año cuando ya no haya efecto rebote.

 

¿Qué es lo que debe hacer el Gobierno para que el crecimiento a partir del 2022 sea vigoroso?

Nosotros estamos con una proyección de crecimiento de 2,3% para el próximo año. Expandirse a un promedio anual de 2,3% o 2,5% es insuficiente para una economía que tiene tantas carencias, para una economía en donde vamos a tener que crecer aceleradamente para reducir rápidamente la pobreza.

 

El año pasado, un vasto sector de la población regresó a la condición de pobreza y la única manera de reducirla de manera rápida es creciendo rápido y sostenidamente. No hay otra solución, y para hacerlo es necesario mejorar las perspectivas de inversión.

 

¿Y qué se tiene que hacer para  tener  inversión?

 

Es confianza. Esa es la primera medida que sugeriría a la administración actual porque cuando el clima para los negocios y emprendimientos mejora, las personas, empresarios y emprendedores están dispuestos a tomar más riesgo.

 

Si hay mucha incertidumbre, no hay respeto al estado de derecho y sí hay anuncios contradictorios por parte del Ejecutivo, la confianza no se recupera y, por lo tanto, la inversión se mantendrá débil. Entonces, si no hay inversión, no hay generación de empleo y el crecimiento será muy bajo.

 

Al Perú le fue muy bien cuando la inversión privada crecía a tasas de dos dígitos y buena parte de ello se dio por el boom minero. Ahora con altos precios de las materias primas, especialmente del cobre que exportamos, lo que debería estar haciendo la administración actual es dar señales y garantías para que se desarrolle más inversión minera en el país porque los precios del cobre se van a mantener altos por la reconversión de la infraestructura hacia una (industria) verde a nivel global.

 

Luego podemos hablar de medidas para hacer más eficiente el gasto público. No es una cuestión de dar recursos, el gasto público en los últimos años ha demostrado que tiene una serie de ineficiencias que hay que subsanar. Se tiene que ver lo que se da para gastar y terminar con buenos niveles de ejecución.

 

Y la tercera medida, que de todas maneras tiene que venir, es una reforma tributaria que permita efectivamente captar más recursos porque los estragos que va dejar la pandemia entre otras cosas es más endeudamiento y no queremos una deuda pública que en pocos años se pueda convertir en un lastre para el crecimiento económico.

 

Tenemos que tomar medidas para, primero, estabilizar la deuda pública. Uno no puede empezar a usar la tarjeta de crédito de manera ilimitada. Ahí creo que hace bien el Gobierno en solicitar la delegación facultades para legislar en materia tributaria.

 

El punto es que para temas tributarios sensibles se debe tener mucho capital político y eso solo se logra, otra vez, con confianza. El contribuyente tiene que estar seguro de que el dinero que tributa se gaste bien.

 

¿Cómo ve la inversión para el 2022?

 

Prevemos una contracción de más de 9%, sujeta a una serie de supuestos. Ojalá nos equivoquemos. Pero, para poder ver una inversión en franca recuperación reitero y regreso al tema de confianza. Lo que necesitas es inversión y, para ello, el pre requisito es confianza.

 

Ese es el tema hace varias décadas en macroeconomía, donde entendemos muy claramente el rol fundamental que tienen las expectativas del sector privado para el crecimiento económico.

 

Y el anuncio del cierre de las cuatro minas en Ayacucho…

 

Es lamentable que poco antes el presidente Pedro Castillo haya salido con un mensaje de dar garantías respecto al estado de derecho y a las inversiones y luego se hayan dado las declaraciones de la premier que espero haya sido un desliz o equivocación. Pero, generó tanta incertidumbre y pérdida de valor en un solo día a Hochschild, disminuyendo su capitalización bursátil en más de US$ 300 millones en la Bolsa de Londres.

 

Con estos anuncios estamos ahuyentando la inversión.

 

Sí. Para que eso no ocurra creo  que el Gobierno tienen que centrar mejor sus mensajes si realmente tiene esta visión y comparte la idea de que es importante la inversión y que esta es bienvenida y, desde luego, siempre respetando los estándares de calidad, salud y respeto de derechos.

 

Sería lamentable que perdamos la oportunidad de aprovechar los altos precios del cobre y atraer más inversión en ese sector que dinamiza tanto la economía. El periodo del auge minero permitió que la economía crezca entre 8% a 9% entre el 2003 y 2008.