El legado de Samuel Gleiser Katz
Hace cinco años, el 16 de febrero del 2017, el expresidente de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), Samuel Gleiser recibió la condecoración la Orden del Sol del Perú en el grado de Gran Cruz en reconocimiento a su trayectoria empresarial. Dicho reconocimiento fue otorgado por el entonces presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski.
Samuel Gleiser Katz inició su fructífera trayectoria en la CCL desde el año 1976, siendo presidente de la institución en cuatro oportunidades. Durante su gestión fue impulsor de iniciativas para mejorar la gestión administrativa y de infraestructura de la CCL.
En la ceremonia de condecoración realizada en Palacio de Torre Tagle, Gleiser Katz contó con la compañía de su esposa, hijos y familiares. En su discurso de agradecimiento, narró cómo se inició en el mundo empresarial. Contó que, desde el año 1974, se dedicó a la industria de cierres y demás dispositivos para el sector textil, primero, a través de la empresa Reymatic, y después con Corporación Rey.
Promotor del comercio exterior
Es importante destacar que el líder empresarial de la CCL trabajó intensamente para promover el comercio exterior y la interconexión de las cámaras de comercio del país. Así, promovió la creación del Centro de Investigación Empresarial, hoy el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la CCL (IEDEP), así como el Instituto de Desarrollo e Investigación de Comercio Exterior (IDEXCAM).
Entre los años 1992 y 1994, el Perú se insertaba en la globalización, por lo que en su primera gestión percibió la necesidad de incorporar al Perú al mercado global. Organizó misiones empresariales al exterior y con la cooperación de la Comunidad Europea estableció en la CCL el primer Eurocentro de Cooperación Empresarial de Latinoamérica.
Asimismo, desde entonces apoyó a esa nueva estirpe de empresarios, los emprendedores; obteniendo del BID el primer crédito de US$ 3,5 millones para las pymes.
Institucionalización del arbitraje
En 1993, Samuel Gleiser impulsó la institucionalización del arbitraje como “jurisdicción de excepción” en la nueva Carta Magna, así como la organización e instalación en la CCL del primer Centro de Arbitraje, considerado hoy como una de las más importantes instancias de la región, en la solución de las controversias empresariales.
También gestionó y logró que el 20 de abril de cada año, fecha de fundación de la CCL, sea declarado mediante R.S. 132-93/PCM como el “Día del Comercio”.
En su segunda gestión, entre los años 2000 y 2002, además de impulsar decididamente la difusión de las ventajas de libre comercio organizando foros y seminarios a nivel nacional para alcanzar el TLC con Estados Unidos, inició la incorporación de la CCL a los avances tecnológicos, creando el portal e-camara.net, para dinamizar los negocios entre las empresas.
También desde entonces, bajo su impulso, la revista institucional semanal de la CCL, hoy con el nombre de “La Cámara”, empezó a editarse a todo color, con renovado contenido y diseño.
Durante su tercera gestión, entre el 2006 y el 2008, además del decido impulso al primer TLC con Estados Unidos, se abocó a la implementación de las tecnologías de punta en los servicios a los asociados.
Asimismo, su concepción de un proyecto arquitectónico para convertir a la CCL en un moderno centro de negocios internacionales, se materializó el 20 de diciembre del 2007, cuando puso al servicio de los asociados el Moderno Complejo Empresarial.
Samuel Gleiser asumió por cuarta vez la conducción de la CCL entre el 2012 y el 2014, siendo uno de sus más importantes logros, la construcción e inauguración el 29 de enero del 2013 de un moderno edificio ecoeficiente de 10 pisos, construido en un área total techada de 4.500 m2, con oficinas, salas de reuniones y amplios sótanos para el estacionamiento de vehículos.
¿Qué legado nos dejó?
Samuel Gleiser Katz falleció en setiembre del 2017, meses después de haber sido galardonado con este importante reconocimiento. Hombre de acción, con una férrea voluntad para alcanzar sus objetivos, visionario e innovador, fue un incansable promotor de la excelencia, contribuyendo decididamente en los últimos 25 años al fortalecimiento y al liderazgo de esta centenaria institución, que hoy es un referente de la vida económica y empresarial del país.
Durante su trayectoria como empresario, Samuel Gleiser nos dejó un legado muy importante, que es la lucha contra la corrupción. Siempre resaltó la necesidad que en nuestro país se erradique la corrupción.
Para ello, insistía que era importante que el Perú restablezca una política de educación cívica y de valores que se implemente desde la educación primaria con base en una cultura de integridad y de transparencia.
Gleiser fue, asimismo, promotor de grandes eventos como el “Foro Anual de Economía Quo Vadis” y la “Cumbre Internacional de Comercio Exterior”, entre otros, y que son ya una marca de la CCL.
Impulsó y creó la condecoración de la Orden de La Cámara en el Grado de Comendador que ha sido otorgada a destacables personalidades del país.
Nuestro recordado líder también tuvo una permanente vocación integradora de las cámaras de comercio regionales, con el propósito de fortalecer la “institucionalidad cameral”, pues las cámaras de comercio, son los gremios empresariales de más larga data en el Perú y el mundo.
De este modo, no solo fue un hacedor nato y un permanente innovador que contribuyó a la modernización de la infraestructura de la CCL, para convertirla en una moderna plataforma de negocios, sino también a la proyección y al fortalecimiento del liderazgo empresarial de CCL.
Fue, además, un hombre justo y de fe, es decir, un gran ser humano. Supo compartir sus logros institucionales en con sus colaboradores y los éxitos de su empresa Corporación Rey, con sus trabajadores.