Banco Mundial: Precios de la energía se recuperarían en 2021 y crecerían 9,3%
El Banco Mundial (BM) proyectó que los precios de la energía, a pesar de haber mostrado una ligera recuperación, se estabilizarán en niveles inferiores a los existentes antes de la pandemia en el 2021 (+9,3%), luego de caer 32,7% este año.
Asimismo, los precios de los metales y de los productos básicos agrícolas registrarían aumentos moderados el próximo año.
Sin embargo, la aparición de una segunda ola de contagios que genere más confinamientos y reduzca el consumo, así como la existencia de demoras en el desarrollo y la distribución de las vacunas, podrían llevar a que los precios de la energía disminuyan más de lo previsto.
►Banco Mundial prevé la mayor caída de remesas de la historia reciente
►Banco Mundial: PBI de América Latina y el Caribe caería 4,6% en el 2020
Baja demanda de petróleo
Según el informe bianual Commodity Markets Outlook (Perspectivas de los mercados de productos básicos), el BM prevé que en el 2021 el barril de petróleo costará, en promedio, USD 44, cifra superior a los USD 41 estimados para el 2020.
La demanda aumentaría lentamente mientras continúen vigentes las restricciones al turismo y a los viajes debido a los problemas sanitarios. Sin embargo, se espera que el consumo de petróleo se mantenga por debajo de su nivel prepandémico hasta el 2023.
Se prevé que en el 2021, los precios de los metales, tras haber caído en 2020 (-1,1%), registren aumentos moderados de 2,1%, gracias a la paulatina recuperación de la economía mundial y al estímulo constante proveniente de China. Pero, el BM señala que si el crecimiento mundial siguiera desacelerándose durante un período prologando, los precios bajarían más de lo previsto.
“En el mundo del nuevo coronavirus, los países emergentes deben ser más activos en la implementación de políticas destinadas a reducir su dependencia de los ingresos derivados del petróleo”, anotó Ayhan Kose, vicepresidente interino de Crecimiento Equitativo, Finanzas e Instituciones, y director del Grupo de Perspectivas del Grupo Banco Mundial.
Precios agrícolas estables
Los precios agrícolas casi no se vieron afectados por la pandemia, pero la cantidad de personas en riesgo de padecer inseguridad alimentaria ha aumentado como resultado de los efectos más generales de la recesión mundial.
El BM prevé que en el 2021 los precios agrícolas, tras aumentar 2,8 % en 2020, se incrementarían ligeramente el próximo año y crecerán 1,4%, como consecuencia del déficit en la producción de aceite comestible.
Además, precisó que las preocupaciones relacionadas con la inseguridad alimentaria siguen siendo considerables en varias economías emergentes y de mercados emergentes.
Dichas preocupaciones están motivadas por los impactos de la recesión mundial en los ingresos, las dificultades en la disponibilidad de alimentos a nivel local y las restricciones aduaneras que han restringido la oferta de trabajo. Es así que la inflación del precio de los alimentos se ha acelerado considerablemente en varios países.
Estímulos fiscales
El Banco Mundial alertó que una alteración transitoria del precio de los productos básicos puede requerir la adopción de políticas de estímulo fiscal para moderar el consumo.
Ante ello, recomienda que, durante las etapas de auge, los países que dependen de las exportaciones de productos básicos sometidos a oscilaciones de precios cíclicas generen mecanismos de amortiguación fiscal y los utilicen durante los períodos de depresión económica para respaldar la actividad económica.
Por ello, aseveró que en los países que dependen en gran medida de productos básicos sujetos a conmociones permanentes, puede ser necesario adoptar políticas estructurales, como la diversificación y ampliación de la base tributaria, para facilitar los ajustes al nuevo entorno económico.