25 actividades económicas moderaron su caída en junio
Las consecuencias económicas de la crisis generada por la COVID-19 son cada vez más palpables. La demanda interna deprimida con caída en el consumo privado, reducción en los ingresos de los hogares y altas tasas de desempleo y la acumulación de deudas han llevado a que sean muchas las actividades económicas afectadas en el primer semestre.
Por ello, un diagnóstico claro de la situación actual permitirá repensar las políticas prioritarias a emprender para la reactivación económica del país.
En esta línea, el Banco Internamericano de Desarrollo (BID) señala que el gasto fiscal adecuado para la recuperación económica eficiente en América Latina requiere de una inyección de al menos entre 3 a 4 puntos el PBI.
Análisis general
Los resultados macroeconómicos a junio revelan un retroceso del PBI de 18,1% moderando su caída por segundo mes consecutivo (-39,3% en abril y -32,7% en mayo) lo que da un indicio de que a nivel agregado la producción viene cayendo menos en comparación a los primeros meses de la crisis.
En el caso del empleo en Lima Metropolitana, hasta el trimestre móvil abril-mayo-junio se acentuaba la caída en la población ocupada de -55,1%; pero, en el trimestre mayo- junio-julio empezó a mostrar una desaceleración en la caída hacia el -40,2% considerando que es el periodo donde se iniciaron las tres primeras fases de reactivación económica.
Por su parte, la inflación a julio alcanzó 1,9%, similar al nivel de inicios de la crisis. En tanto, en junio los créditos directos del sistema financiero crecieron 14,6%.
A junio, a un nivel de desagregación de ocho sectores, los resultados alcanzados fueron: (i) Se moderó la caída por segundo mes consecutivo en Manufactura, Electricidad, Construcción, Comercio y Servicios; (ii) en Minería e Hidrocarburos se moderó la caída por primera vez en lo que va de la crisis; (iv) en Pesca se registró una recuperación por el inicio de la primera temporada de pesca en la zona centro- norte; (v) en Agropecuario se observó una contracción de la producción por primera vez en lo que va del año.
No obstante, para un mayor análisis se han desagregado los el pbi cayó 18,1% en junio. con ese resultado la economía peruana registra caída de 17,4% en primer semestre sectores en 35 actividades económicas más específicas para así conocer su desempeño en el primer semestre.
Aprobaron el semestre
En el primer semestre, el PBI global cayó en 17,4%. Diez actividades económicas obtuvieron balance positivo.
Incluso, cuatro de ellas lograron un crecimiento ininterrumpido: (i) Telecomunicaciones (+7,5%), ante la mayor demanda de servicios de telefonía (+6,8%) –principalmente móvil–, así como el servicio de internet por motivos educativos, laborales y de entretenimiento; (ii) Financiero y seguros (+6,7%), pese a la desaceleración de los créditos de consumo e hipotecarios, aquellos destinados a empresas inclinaron la balanza a un resultado positivo; (iii) Servicios gubernamentales (+4,2%), por mayores gastos asociados al control de la crisis de la COVID-19 en sectores como salud, interior y defensa, tanto a nivel nacional como sub-nacional; (iv) y Agua (+1,4%), por la mayor producción en Lima Metropolitana como en otras regiones.
Por su parte, seis actividades tuvieron crecimiento intermitente, pero salvaron el periodo. Dos de ellas corresponden a actividades primarias:
(i) Agrícola (+2,8%), principalmente por cultivos orientados al mercado interno como arroz cáscara (+16,3%) y papa (+4,8%), mientras que los orientados a la agro exportación decayeron, como el café (-8,6%) y aceituna (-12,0%); y (ii) Pecuario (+0,7%), por la mayor producción de ave (+1,2%), huevos (+1,9%), leche fresca (+1,3%) y porcino (+2,5%), aunque en esta actividad disminuyó la carne de vacuno (-2,3%).
En tanto, tres actividades están ligadas a la manufactura de consumo masivo que al ser consideradas esenciales pudieron operar con normalidad durante el primer semestre.
Se trata de Elaboración de productos de panadería (+18,1%), Elaboración y conservación de carne (+0,4%) y Elaboración de azúcar (+0,6%). La última actividad, también incluida en manufactura primaria, Fabricación de productos primarios de metales preciosos y otros metales no ferrosos, mostró un importante crecimiento (+10.9%).
Señales de reactivación
Por otro lado, existen 25 actividades, la gran mayoría no esenciales, con balance negativo en el primer semestre. Estas fueron duramente golpeadas desde el inicio de la cuarentena en la segunda quincena de marzo. Inclusive 22 de ellas no lograron salvar el primer trimestre.
No obstante, luego de un duro abril de plenas restricciones todas han evidenciado moderación en su caída desde el inicio de las fases 1 y 2 de reanudación de actividades implementadas a inicios de mayo y junio, las que inicialmente fueron bastante burocráticas, corrigiéndose en la marcha, aunque aún son perfectibles.
Dentro de este grupo de 25, cuatro lograron crecer en junio.
Se trata de Pesca extractiva de anchoveta (+95,9%), ante el inicio de la primera temporada de pesca en quincena de mayo; Elaboración y conservación de pescados, crustáceos y moluscos (+70,4%); Fabricación de jabones y detergentes, preparados para limpiar y pulir, perfumes y preparados de tocador (+10,0%); y Fabricación de muebles (+17,2%). Asimismo, otras cuatro actividades moderaron su caída en el mes de junio incluso por debajo del PBI nacional (-18,1%) otorgándole mejores expectativas de recuperación. Es el caso de la Minería metálica (-13,6%), Fabricación de productos de plástico (-12,5%), Electricidad (-12,4%) y Gas (-10,1%).
Las restantes 17 actividades también moderaron su caída en junio aunque a tasas superiores a las del promedio nacional. Ocho de ellas por debajo del -35% (alrededor del doble de la media nacional).
En el sector primario figuran la Pesca extractiva para consumo humano directo (-33,0%) e Hidrocarburos (-19,7%); mientras que en el sector secundario están la Fabricación de cemento, cal y yeso (-31,8%) debido al reinicio de obras de construcción a nivel nacional.
En el sector terciario figuran Venta, mantenimiento y reparación de vehículos (-28,9%), Ventas al por mayor (-26,2%), Ventas al por menor (-31,8%), Almacenamiento, correo y mensajería (-30,5%) y Otros servicios (-18,4%).
Las 9 actividades restantes aún caen a tasas superiores al 35% entre las que se ubican Construcción (-44,6%), Transporte (-48,2%), Alojamiento (-98,9%) y Restaurantes (-82,3%).
Caída del PBI del 2020
Bajo las actuales condiciones se proyecta una caída del producto de -12,9% para el 2020, con un fuerte impacto en las condiciones económicas y sociales de la población.
Por ello, son fundamentales los esfuerzos desde el sector público y privado para revertir esta tendencia.
En ese sentido, en el corto plazo y para dar paso a la reactivación económica, es indispensable detener la tasa de contagios e impulsar la inversión pública; a la par de continuar las políticas de transferencias a hogares que no tienen ingresos, así como de programas de financiamiento como Reactiva Perú y FAE MYPE para garantizar el empleo y la subsistencia de las mypes.
Solo así, la reanudación de actividades se transformará en una plena reactivación económica.